Ahogado de la risa

Dicen que los contadores son señores con los que normalmente no se cuenta nunca, por eso celebramos su día con unos chistes:

Un contador muere y se reporta en las puertas del Cielo. San Pedro, que últimamente andaba un poco distraído, no encuentra su nombre en la maraña de papeles y lo manda al infierno.

Ya en el infierno, lo hospedan inmediatamente y pasa poco tiempo para que el contador comience a organizar todo el departamento. Ya tenía nuevo organigrama, reportes administrativos sobre entradas y salidas, estados financieros comparativos con el siglo anterior, estado de flujo de cenizas y carbones y una red de computadoras de nueva generación.

Un día, Dios le marca al diablo y con tono de sospecha le pregunta:

-¿Cómo han estado las cosas por allá en el infierno?

-Aquí todo está perfecto, tenemos un control administrativo y financiero de lujo, ¡no sé cuál será la próxima sorpresa del contador! -responde el pingo muy contento.

-¡¿Qué?! -reacciona Dios muy enojado-, ¿tienen un contador ahí? Eso es un error, nunca debió pasar. Los contadores siempre van al cielo, eso está resulto. ¡Me lo mandas para acá inmediatamente!

-¡Ni loco! Él se va a quedar aquí conmigo, hagas lo que hagas -le responde muy cínicamente el Diablo.

-Si no me lo mandas, ¡te voy a demandar! -lo amenaza Dios más enojado que nunca.

A lo que el Diablo, con la visión nublada de tremenda carcajada que soltó, le responde:

-¿Ah, si? Me vas a demandar. Y nomás por curiosidad... ¿de dónde vas a sacar un abogado?

..............

Un Jefe de la Mafia descubrió que su contador había desviado para sí 10 millones de pesos.

El contador era sordo y cuando el Jefe le fue a preguntar por los 10 millones llevó consigo al abogado...

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