La comedia política / El celular es del diablo

Estaban varios amigos en la cantina viendo un partido de futbol cuando de pronto sonó el celular de uno de ellos:

-¿Bueno?

-Hola, mi amor, ¿te interrumpo?

-No te preocupes, dime.

-Ay, ya sé que estás con tus amigos, pero ¿qué crees? Que viene con mis amigas al centro comercial y, ay no lo vas a creer, resulta que están en oferta... ¡los abrigos de piel!

-No me digas. ¿Y es bueno el descuento?

-Ay, sí, mi amor. Nos hacen el 8 por ciento de descuento y lo podemos pagar a meses.

-¿Sin intereses?

-No, con intereses, pero hasta en 36 meses.

-Mmmmm... pues suena bien. ¿Cuánto cuesta el abrigo?

-Híjole, cielo, este...

-Dime, anda, dime cuánto cuesta, cosita.

-Bueno: pues vale 87 mil pesos ya con el descuento.

-Cómpralo.

-¿¿¿De verdad???

-Claro, corazón, cómpralo. Es lo menos que puedo hacer por mi mujercita hermosa.

-¡Ay, Roberto! Eres maravilloso.

-Oye, ¿y no necesitas zapatos nuevos? Digo, si vas a estrenar abrigo de piel, ni modo que uses unos zapatos que no te combinen.

-Pues, mira, ahora que lo preguntas justo acabo de ver una botas que le quedarían divinas al abrigo. Lo malo es, ash, ya sabes: ¡el precio!

-Cómpralas.

-Pero están muy caras, Roberto.

-¿Cuánto?

-Pues 17 mil pesos.

-Eso y más te mereces, preciosa.

-¡Mi vida! Me haces la mujer más feliz. Bueno ya no te quito tu tiempo, que te la pases bien y nos vemos más tarde en la casa, ¿sale?

-Sí, mi vida, tú también diviértete. ¡Ah! Y no olvides comprarle algo bonito a tu mamá.

-Sí, Roberto, sí. Lo que tú me digas. Adiós, amor.

-Adiós.

Al colgar el celular, el sujeto lo pone sobre la mesa y pregunta con un grito a los demás: "¿Quién chingaos es el Roberto dueño de este teléfono?".

Lo dicho: los celulares son del diablo. Son un invento maléfico que supuestamente sirve para hacer llamadas telefónicas, pero en realidad su función es meternos en problemas, aislarnos de los demás y sangrarnos cada mes la cartera.

Si no me crees, pregúntale al delegado capitalino Mauricio Toledo quien acaba de ser exhibido tratando de extorsionar a un empresario.

El jefe de la Delegación Coyoacán tuvo el mal tino -o mal gusto- de hacerlo a través de su celular. Es decir, por medio de mensajitos de Blackberry.

Y por supuesto todo el diálogo con el abogado quedó grabado y ahí claramente se lee como el perredista pide "800 mil extras". Según el propio abogado, con esta nueva petición el total de la mordida se elevaba a un millón...

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