La nueva identidad de los museos, a debate

AutorJorge Sánchez Cordero

Paul Valéry (Leproblème des musées)

... deslumbrados por el oro de los marcos...viendo pasar las imágenes, demasiado numerosas como para poder apreciarlas bien... la comitiva, ya cansada, perdiendo el respeto, arrastraba sus zapatos...

A Rufino Tamayo. In memoriam.

En un estudio clásico el sociólogo francés Pierre Bourdieu (L'amour de l'art) tomó como muestras museos europeos y demostró que solamente aquellos públicos que ya poseían una formación cultural previa, fundada en un entorno social y familiar favorable, continuaban visitando regularmente los museos después de haber terminado su ciclo escolar. Más aún, sostuvo que los museos, tanto en su morfología como en su organización, reforzaban en sus visitantes, contrariamente a sus funciones, sentimientos contradictorios: de pertenencia cultural o bien de franca exclusión.

El diagnóstico es claro. La función del museo, heredera de la museología clásica que provenía de la Revolución Francesa, se encuentra agotada. Este modelo había permanecido prácticamente inmutable hasta la primera mitad del siglo XX, como también lo había sido el mismo estrato social asiduo a visitas mu-seísticas, con evidente exclusión de una parte significativa de la población inmersa en sus rémoras sociales y carente secularmente de elementos que le permitieran confrontarse con algunas ideas del conocimiento

La crisis de la concepción museológica ha propiciado la búsqueda de una nueva identidad. Existen esfuerzos significativos en este orden para superar la definición adoptada hace tiempo por el Consejo Internacional de Museos (ICOM por sus siglas en inglés) que considera al museo como una institución permanente, sin fines lucrativos, al servicio de la sociedad y de su desarrollo, abierto al público, que adquiere, conserva, investiga, comunica y exhibe, con propósito de estudio, educación y delectación, las evidencias tangibles e intangibles de las personas y de su ambiente.

Los esfuerzos se han multiplicado. La creación de un nuevo catálogo de términos museográficos, e incluso la redacción de un tesauro de museología por parte del Consejo Internacional para la Museología (ICOFOM por sus siglas en inglés e ICO-FOM LAM para América Latina), son claros síntomas de una nueva concepción museológica.

De la crisis de la concepción museológica han surgido nuevas tendencias que se han desarrollado en el rizoma museísti-co y cuyo común denominador es una redefinición del museo. El ecomuseo, los museos comunitarios, la digitalización de imágenes que representan solamente algunas de esas tendencias, se nutren de una nueva concepción museológica radicalmente distinta a los cánones clásicos.

El templo de las Musas

Difícilmente en el término museo se puede encontrar el antecedente de la actual institución. El Mouseion griego en Alejandría -o "templo de las musas"- obedeció a una función distinta. El conjunto de sus textos no refería la existencia de colecciones; restituyó empero el entorno en donde habría de predominar la memorización, el diálogo y la discusión.

El único vínculo con la concepción museística actual pudiera explorarse, en el estudio y en la investigación, y en menor medida en la enseñanza. El estudio, más que en la discusión y en la retórica, se funda en la observación científica; el principio de la investigación, ya sea en humanidades o ciencias, se constituyó como uno de los elementos constitutivos del museo actual.

Más semejantes a la concepción actual serían la pinacoteca de la Acrópolis ateniense...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR