De todo corazón

Poseído sexual

Buenas tardes, Tía. Tengo un problemita y quisiera que me dieras un consejo y lo publicaras. He tenido dos matrimonios, con una mexicana y con una estadounidense, los cuales no funcionaron. Ahorita estoy en una tercera relación, y no sé si soy yo el que está mal, ya que todo el tiempo me posee un deseo sexual y quiero hacerle el amor todo el tiempo, y si por mí fuera estaría todo el día haciéndole el amor. Después de una larga jornada de actividad sexual, mi mujer queda con irritación y hay veces que sólo me masturba porque no quiere tener relaciones conmigo, precisamente porque tiene algún malestar producto del constante ejercicio del sexo. No sé si este deseo sexual que me nace es una enfermedad o problema y quisiera saber si existe alguna forma en la que pueda calmar esa sensación o cómo debo tratar algo así, ya que mi pareja me dice que por qué todo el tiempo ando pensando en sexo. También la celo todo el tiempo y quisiera estar con ella haciéndole el amor para demostrarle que no hay hombre como yo. Gracias por tu columna que es muy buena y espero que pronto me respondas. Gracias por el tiempo.

José Francisco, 29 años, seguridad privada.

Querido José Francisco, una cosa es un alto deseo sexual y otra, muy distinta, es un deseo sexual que no encuentra satisfacción, como parece ser tu caso. Hablas de que quieres tener sexo todo el tiempo, pero no mencionas que eso sea placentero realmente para ti y ya nos dijiste que para tu pareja no es placentero que quieras tener sexo todo el tiempo. Puedes tener un desorden que se llama deseo sexual hiperactivo y hay que tratarlo. Te recomiendo que acudas a un experto de la Asociación Mexicana para la Salud Sexual. El teléfono para que hagas una cita es el 5573-3460.

Académico ilusionado

Hola, Tía Remedios. Tengo una preocupación, no sé si sea mi cargo de conciencia. Soy casado y tengo cuatro hijos, trabajo como profesor en una secundaria y por las tardes trabajo en una Universidad. Tengo estudios de maestría, pero dicen que los estudios no quitan lo testarudo para cometer tarugadas en la vida. Conocí a una chica que trabaja en una corporación policiaca privada, con un salario muy reducido, que también tiene cuatro hijos; ha tenidos dos maridos con malas experiencias. Cuando la conocí, ella estaba enferma y le ayudé con algún medicamento. La plática continuó y le dije que me caía bien y que a ver cuándo nos podíamos dedicar un tiempo, la pregunta inmediata fue de qué forma nos la...

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