'Aceleran cuando nos ven'

Sobre Vasco de Quiroga, en Santa Fe, una línea de barreras naranjas roba espacio a los peatones e invita a los carros a ir más rápido.

En palabras de los transeúntes cruzar esa y otras calles de alrededor es una odisea que les toma entre 5 y 10 minutos, por el constante sentimiento de peligro.

No es casualidad que, sobre Echánove esté uno de los cruces más mortales en toda la Ciudad donde el año pasado hubo 5 atropellados.

"Los carros aceleran cuando nos ven, no sirve de mucho que haya un semáforo porque es muy complicado y peligroso pasar, ahorita una moto se me echó encima", lamentó Giovani Camacho tras atravesar en Joaquín Gallo y Vasco de Quiroga, como todas las mañanas.

"No podemos ver los semáforos, los coches pasan muy rápido sin importar que vayamos a cruzar. Es todo muy complicado, sobre todo arriesgado"...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR