Ahogado de la risa

Y para iniciar la semana, comenzamos con un respetuoso homenaje a nuestros bomberos; y es que si resisten incendios y falta de presupuesto, también aguantarán el siguiente chistorete:

En un voraz incendio, el jefe de los bomberos nota que le faltan dos de sus integrantes.

Cuando los está buscando, observa que el camión se mueve en forma cadenciosa; abre la puerta y encuentra a los dos bomberos perdidos en plena actividad sexual.

- ¡Pero que está pasando aquí!-, pregunta indignado el jefe.

- Lo que pasa es que mi compañero se estaba asfixiando con el humo y yo vine a darle auxilio-, dice uno de ellos.

- ¡Pero para la asfixia lo que se recomienda es respiración boca a boca!- grita enojado el jefazo.

Y el tragahumo, cabizbajo, dice:

- Sí jefe... así fue como empezó todo.

En cierto pueblo un mamá da a luz y el niño resulta ser rubio. El padre, pelirrojo, se inquieta y va a ver al único hombre rubio del pueblo.

- Hombre, Cornelio, ¿qué tal, ya ha parido tu mujer?"

- Mira, no me hables, que vengo encabritado. ¿Sabes que el niño ha salido rubio?

Y el rubio, nervioso, dice:

- ¡Bueno, pero hombre, no te precipites! La naturaleza a veces juega unas bromas muy raras; mira, sin ir mas lejos, ahí tienes mi rebaño de cabras... todas son blancas, excepto una, que nació con la lana cobriza.

El padre se queda paralizado por un momento, y luego dice:

- Mira, vamos a hacer un trato: yo no le digo nada a nadie de mi hijo... ¡y tú no le dices nada a nadie de la cabra!

Llega una viejita a la farmacia y le dice al encargado:

- Me da unas píldoras anticonceptivas para dormir.

- ¿Para dormir, señora? ¿Y le dan buenos resultados?-, pregunta interesado el farmacéutico.

-...

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