Ahogado de la risa

Para aquellos que, más que un placer, viajar les parece un pesar, les dejamos estos chistes sobre turistas:

Un hombre, quien no ha volado nunca en su vida, decide tomar un avión. Cuando está a dos personas del mostrador, se fija en lo que la chica de adelante hace y decide imitarla.

-Me da un billete para Florida, solo ida- pide la chica.

Entonces, es el turno al viajero novato:

-Hola, quiero un billete para Nueva York, sólo York.

Un turista llega a Guadalajara y aborda un taxi para que lo lleve a Tlaquepaque. El taxista va a exceso de velocidad y toma varias curvas sin frenar. El turista, con las manos empapadas de los nervios, le recrimina al chofer:

-¡No hace falta que vaya tan rápido, en la última curva me hizo cerrar los ojos!

El chofer voltea para atrás y le dice:

-Qué bueno que no fui el único, ¿verdad que estaba bien fea?

A mitad de un vuelo, el capitán conecta el micrófono y comienza a hablar:

-Buen día, señores pasajeros, en este exacto momento estamos a 9 mil metros de altura y sobrevolando la ciudad de... !Oh, Dios mío!

Los pasajeros escuchan el grito pavoroso, seguido de un ruido ensordecedor.

Después de varios minutos, el capitán vuelve a tomar el micrófono y riendo se disculpa:

-Disculpen, señores pasajeros, tiré mi bandeja y mi taza de café se me cayó encima. No se imaginan cómo quedó la parte de adelante de mis pantalones.

Entonces, uno de los pasajeros grita:

-¡Desgraciado, ven a ver cómo quedó la parte de atrás de los míos!

Un turista gringo llega al Zócalo y enseguida se maravilla con los concheros y...

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