Ahogado de la risa

Les compartimos varios cuentillos de doctores, por si andan en un consultorio apuesto a que cuando lo vean se van a reír.

Este es sobre un cuate que desde pequeño tenía un tic en el ojo derecho.

Un día estaba en casa con su esposa a quien le dolía la cabeza, por lo que le pidió que se lanzara a la farmacia a comprarle unas aspirinas.

Una hora y media después, el tipo regresó con una docena de paquetes de condones.

- Te pedí aspirinas, no condones.

- Lo sé, fui a una docena de farmacias... pero ¿has intentado pedir aspirinas guiñando el ojo todo el tiempo?

Una mujer va al doctor luego de que éste le había recetado testosterona, (una hormona masculina). Naturalmente, ella estaba un poco preocupada por algunos efectos secundarios que estaba experimentando.

"Doctor, las hormonas que me recetó realmente me han ayudado, pero temo estar tomando demasiadas... me está creciendo pelo en partes en que nunca me había salido...", dijo nerviosa.

El doctor trató de calmarla.

"La aparición de un poco de vello es natural cuando se aplica un tratamiento con testosterona... ¿en dónde le ha salido pelo?"

- "En mis testículos..."

Durante una animada fiesta en la embajada española, un flacucho invitado se sentía enfermo, pero al escuchar que otros asistentes le decían "doctor" a un regordete bigotón, el enfermo pensó...

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