Ahogado de la risa

Las infidelidades de las parejas pueden dar enojos, tristezas y, en muchas ocasiones, varias carcajadas. Si no lo creen, échenle un ojo:

Dos vecinas estaban platicando y una le dice a la otra:

- ¡Wow! Vecina, es increíble el parecido que tiene tu hijo con su papá.

- Sí, lo sé... pero habla más bajito porque mi marido está en la casa.

En un hotel de playa, el botones acompaña a una joven pareja a su habitación.

Después de haber llevado sus maletas, mostrado su cuarto y donde está el mar, el botones pregunta a los turistas si necesitan algo más.

- No, gracias, responde el muchacho.

- ¿Y para su mujer?, dice el empleado.

- ¡Ah! Qué bueno que me lo recuerda. ¿Tiene un sobre y unos sellos postales?

Un par de amigos están echándose una chela en una cantina y uno le dice al otro:

- Oye, el otro día tu mujer me contó un chiste tan, pero tan bueno, que me caí de la cama...

Una mujer que veía a través de la ventana de su casa, le dice a su marido.

- Pancho, ¿te has fijado que el vecino besa todos los días a su mujer cuando se va al trabajo?

- No lo había notado, responde el marido.

- ¿Por qué tú no haces lo mismo?, reclama la mujer.

- ¿De verdad no te importaría que besara a la vecina?

Un niño llega con su padre y le dice:

- Papá...

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