Alaíde, otra vez

AutorMarta Lamas

Además, en agosto de ese año ella había viajado a la ciudad de Guatemala a llevar las cenizas de su marido, Alfonso, y la recibió su cuñado, ministro del régimen de Lucas García, que tenía una postura política totalmente opuesta, pero al fin de cuentas era su familia. ¿Cómo iba ella a imaginar en el segundo viaje que su vida estaba en riesgo? ¿Por qué esta vez el ministro Solórza-no no hizo nada para protegerla? En el mercado la interceptaron junto con su chofer, y fue secuestrada y desaparecida. Cuando su hija no regresó del mercado, doña Julia empezó a buscarla en hospitales y puestos policiacos, y acabó dando aviso de su "desaparición" a los dos hijos que vivían en México, Julio y Laura Solórzano, que inmediatamente se movilizaron.

Recuerdo la desesperación de tantísima gente; la tristeza de José Luis Balcárcel; la valiente oferta de Jorge Carpizo, Gastón García Cantú, Leopoldo Zea, Juan José Bremer y Socorro Díaz de volar a Guatemala a indagar con el gobierno sobre su paradero. A Elena Poniatowska le hablaron por teléfono conminándola a que se presentara en un hotel donde le dirían dónde estaba Alaíde. Por suerte, sus amigas le impedimos que se arriesgara a enfrentar a un loco o a un extorsionador. Fueron días pavorosos, de miedo y dolor.

A mediados de 1981 llegó lo que temíamos: la confirmación de su muerte. Las filtraciones de algunos miembros del ejército narraron una historia atroz: Alaíde había sido llevada a la casa del ministro del Interior, Donaldo Álvarez Ruiz, quien tenía una cámara de tortura. Ahí falleció pocos días después de secuestrada. Años después, el juez Grande Malarska, de la Audiencia Nacional de España, giró una orden de aprehensión contra Donaldo Álvarez Ruiz, porque además de ser ministro del Interior de Guatemala de 1978 a 1982 (justo en el momento de la desaparición de Alaíde Foppa) se ocupaba personalmente de las torturas. Álvarez Ruiz, responsable directo de la muerte de miles de guatemaltecos, vivió tranquilamente en México varios años, pues consiguió la residencia y la protección. Miguel Ángel Granados Chapa, en un artículo de su columna Plaza Pública (Reforma, 19 de diciembre de 2004) dijo que Álvarez Ruiz huyó de Guatemala a Estados Unidos en 1982 y fue recibido en México siete años después, cuando era secretario de Gobernación Fernando Gutiérrez Barrios. Álvarez Ruiz recibió con velocidad su formato FM2 de inmigrado y se instaló cómodamente: compró casas en Tlalne-pantla y en San Luis...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR