Un año sin fiestas

En una pequeña pensión de Buenavista, ocho limusinas tipo Hummer, vehículo predilecto en las fiestas de 15 años, llevan un año estacionadas.

Choferes, fotógrafos, promotores, banqueteros y hasta lavacoches se quedaron sin ingresos.

"Muchos de nuestros choferes también se dedicaban a Uber, pero con la pandemia todos dejaron de conducir y algunos tuvieron que vender sus carros y regresar a sus lugares de origen", contó Arturo García, vendedor de Best Car Rental, negocio especializado en renta de estos vehículos.

Cada servicio de limosina se alquilaba en paquetes que iban de los 3 mil hasta más de 11 mil pesos. Las quinceañeras debían apartar los vehículos con meses de anticipación, pues muchos de ellos tenían sobredemanda.

"En diciembre fue la última vez que salió una de nuestras camionetas, fuimos a unos quince años en Jilotepec (Edomex), contó Iván González, chofer de una unidad.

Cada que una limusina sale a evento gasta mil 500 pesos de gasolina en un servicio de cuatro horas; si el servicio es en el Edomex, los gastos se incrementan alrededor de mil pesos.

"Desde hace seis meses nos hemos visto en la necesidad de dejarlas (las limusinas) en calles del Estado de México, desafortunadamente ya nos han robado rines, calaveras, porque ya no pudimos pagar la pensión, pagábamos 3 mil 500 por camioneta", contó Elizabeth Santiago, encargada de Limusinas...

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