Aportan pistas de desaparición

LA DESAPARICIÓN del jalisciense Oliver Díaz Toscano, fue relacionada con un ex agente de la PGR -también desaparecido- en investigaciones realizadas por la extinta Procuraduría General de Justicia del Estado.

Un año se cumple hoy de que familiares del deportista tuvieron el último contacto, a través de una llamada telefónica.

La historia de la desaparición comenzó la tarde el 10 de julio de 2012, cuando Díaz Toscano salió de un despacho de abogados, situado en la Colonia Jardines del Bosque, donde trabajaba con su padre.

El joven, entonces de 24 años, se despidió de su pariente y le dijo que iría a la casa de su novia.

El taekwondoín no regresó a su domicilio esa noche y su padre le llamó por teléfono cerca de la 1 de la madrugada de siguiente día para avisarle que tenían que viajar a Colima para resolver un asunto.

Díaz Toscano le explicó a su progenitor que seguía en la casa de su novia, según el expediente al cual METRO tuvo acceso.

La mañana del 11 de julio del año pasado, el padre se comunicó de nuevo con el deportista para avisarle que, en vez de ir a Colima, irían a Ameca.

El taekwondoín le dijo a su padre que se encontraba en el Fraccionamiento Bugambilias y acordó llegar a las 11:00 horas al despacho, sin embargo, no se presentó y esa fue última vez que se tuvo contacto con él.

La denuncia por el caso fue presentada el 12 de julio y elementos de la Procuraduría, hoy Fiscalía Central, establecieron que Díaz Toscano tenía amistad con José Elpidio Ortiz Acosta, de 37 años, un ex agente de la PGR.

Éste último también desapareció el 11 de julio y por su caso fue interpuesta una denuncia aparte, aunque...

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