Al calor del volante

Autos que cambian de carril intempestivamente, conductores agresivos y violentos, y cláxones desesperados que suenan aunque el semáforo esté en rojo, son ejemplos de la ansiedad con que circulan diariamente los automovilistas en nuestra Ciudad.

Dicen que la duración de un segundo se mide con relación al momento en que se enciende la luz verde y lo que tarda en pitar el conductor que está atrás de uno.

El incremento en el parque vehicular trae consigo el aumento del ruido, el peligro y las prisas para llegar a un destino, muchas veces a costa de los demás.

El clima también hace su contribución. Los factores calor o frío se van sumando a la cuenta de la impaciencia del conductor que tarde o temprano tendrá que utilizar o abrir alguna válvula de escape para disminuir o manifestar su inconformidad.

Las razones que orillan a los automovilistas a comportarse de este manera, van según José de Jesús Gutiérrez Rodríguez, presidente del Colegio de Profesionales de la Sicología, desde la situación urbanística y medio ambiental hasta las condiciones sociales y económicas.

"Guadalajara creció muy aceleradamente, la gente va siempre con prisa y en distancias largas; el tardarte a veces 3 ó 4 segundos está generando problemas de violencia, hay poca tolerancia e irritabilidad", comentó el especialista.

Un medio ambiente deteriorado, con mala calidad del aire, exceso de ruido y carencia de áreas verdes son factores que, según Gutiérrez Rodríguez, generan también ansiedad, que puede canalizarse como estrés.

Además, la falta de oxígeno en el organismo provocado por la inhalación de contaminantes, es otro factor detonante.

"Aspirar el humo de los automotores genera trastornos por intoxicación, caracterizados por baja eficiencia de los procesos cognitivos y sicomotores, irritabilidad, fatiga y estrés", dijo el también presidente de la Red Ciudadana.

Los hábitos inadecuados de alimentación o de descanso pueden causar irritación al enfrentar un embotellamiento o a un chofer agresivo.

La situación económica también afecta directamente el comportamiento de los individuos, pues según el especialista, la Organización Mundial de la Salud (OMS) prevé un aumento de trastornos sicológicos resultado de la crisis económica.

"Si no hay empleo, o es temporal, o está mal pagado, y en un contexto donde hay un exceso de bienes y servicios para consumir, entonces se genera frustración, ansiedad y hasta agresión", declaró el especialista.

La Secretaría de Vialidad, informó que...

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