Chilang Balam / De Hollywood a los Pinoles...El Titanic llega a Constituyentes

¡Chido que llegaron mis estimados masiosares! Recuérdenme darles un premio por arrimarse sin resquemores a esta página chacotera. A propósito de premios y merecimientos, ayer me acordé de la chunga que le metimos al Gobierno del Dfectuoso, por aquella vez que pretendieron brindarle las llaves de la ciudad al agente 007. ¿Se acuerdan? Entre broma y no, decíamos que namás faltaba que Cuauh estuviera viendo que famoso del cine le señalaban sus asesores, para ir a entregarle legajos y sonrisas. Pa fortuna de los ufanos capitaleros, jamás se llevó a cabo la pipiolera entrega. Lo gacho es que ora sí se concretó una de esas, pero en los Pinoles. El presidente de nuestro país impuso hace 2 días la orden mexicana del Aguila Azteca en su grado de insignia al director de la película Titanic, James Cameron. Este premio que les platico, es la máxima insignia mexicana que un extranjero puede recibir, pero ¿Por qué a él? Dicen las notas que el cinero canadiense la recibió por confiar en los trabajadores mexicanos. Si por eso fuera habría que premiar la excelencia de los trabajadores mexicanos, que ya no tienen costumbre de confiar en nadie. También se dijo que la tal Titanic era tan mexicana como un producto de Hollywood, y que por haber recibido cantidades industriales de Oscares, Cameron y México habían hecho historia juntos. Antes de soltar una lágrima, habría que preguntar en que país del mundo se consigue una mano de obra tan barata y tan calificada como la nuestra. Si a esas fuéramos, quien sabe cuantas insignias quedamos a deber entre todos los que produjeron friegos en Durango y en Puerto Vallarta, en Guerrero, en Morelos y hasta en el Metro Chabacano. Entre las cortesías que todos se cruzaban, se comentó que el Cameron era uno de los más renombrados directores del planeta. Y sí es cierto, mucho y muy nombrado, pero ser tan mentado no lo pone ni siquiera cerca de los mejores. Es como no saber la diferencia entre un éxito taquillero y una película que hace historia. Titanic hará historia en los cuadernos de gran cuadrícula, pero jamás en los que reposan los clásicos. ¿Quién recibirá la siguiente insignia? ¿Y quién la aceptará después de Cameron? Pa la poca fortuna de todos nosotros, el consejo de premiación ha de tener un póster de Leonardo di Caprio en alguna pared de sus dominios. ¡Recontra chaaaaaaale...

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