Consejos humanos de todo corazón

Casados sin casa y sin sexo

Buenas tardes, una semana antes de la pandemia me casé y hasta ahora no he podido vivir con mi esposo. Ambos vivimos con nuestros padres, que son adultos mayores. Al principio nos asustamos y creímos que lo mejor era esperar, aunque nunca esperamos que fuera tanto tiempo. Familiares cercanos de ambos se han contagiado y por eso no me animo a vivir en su casa, es doble riesgo para sus papás, ya que ambos trabajamos y tenemos contacto con mucha gente durante el día. El problema es que ya nos estamos desesperando, sí nos vemos a veces, pero no es lo mismo, los hoteles están muy caros y en nuestras casas siempre hay gente. Nuestra vida sexual a un año de casados ha sido casi nula.

Sobrina, 27 años

Buenas tardes, querida sobrina. ¿Pagan hoteles, pero no tienen su propio espacio? ¿El sueldo de los dos no les da para pagar una renta? ¿A qué se debe que hayan decidido quedarse a vivir cada uno en su casa de familia? Comprendo el miedo que sintieron, pero ante el alargamiento del tiempo de la pandemia es momento de tomar las decisiones que necesiten para construir el tipo de pareja que quieren ser. Tal vez les será de utilidad ponerse de acuerdo para vivir en la casa donde haya menos gente para que puedan tener sexo sin sentirse incómodos, tomando las precauciones necesarias para evitar algún contagio a los adultos mayores que viven ahí, o ver si con el sueldo de los dos pueden pagar algún lugar, aunque sea pequeño. El reto de los dos es analizar su situación y ver qué pueden hacer para estar juntos y ver cómo van a desarrollar su pareja porque hay que reconocer que a la pandemia todavía le cuelga.

Desempleado y orgulloso

Tía, tengo un problema con mi esposo. Hace más de un año que lo despidieron del trabajo, entonces lo tomó con calma, pero luego nos cayó la pandemia y nada más no ha encontrado nada. De repente hace donas y empanadas y sale a vender, pero las ganancias son muy pocas y cada vez necesitamos más el dinero. Nos hemos mantenido con mi sueldo de cajera en el súper, pero ya no alcanza, los niños crecen y necesitan cosas para estudiar. Mi papá me ofreció ayuda, pero mi esposo...

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