Se Cumplen 25 añOs Sin El Escultor Mexicano Luis Ortiz Monasterio
(Semblanza)
México, 15 Feb. (Notimex).- El escultor y académico mexicano Luis Ortiz Monasterio a 25 años de su muerte, ocurrida el 16 de febrero de 1990, es considerado uno de los artistas contemporáneos más importantes del país.
Dueño de una impresionante cultura, el pintor además supo plasmar en su propuesta el arte y las tradiciones prehispánicas de su país de origen.
Ortiz Monasterio, quien vio la primera luz el 23 de agosto de 1906 en la Ciudad de México, en 1920 ingresó a la Escuela Normal para Maestros y estudió dibujo, grabado y escultura en la Academia de San Carlos.
Seis años más tarde, el pintor Alfredo Ramos Martínez (1871-1946), entonces director de la institución, le asignó una plaza como profesor.
De acuerdo con información publicada en el portal electrónico "biografiasyvidas.com", posteriormente, el joven artista impartió uno de los talleres de la Escuela de Escultura y Tallado, donde compartió sus conocimientos con decenas de estudiantes.
Sus obras empezaron a ofrecer un amplio abanico estilístico, así como una vasta interpretación de la antigüedad clásica, egipcia, india e indígena, con un marcado tono realista, refiere su perfil difundido en "biografiar.com".
En 1925 viajó a California, Estados Unidos, donde estudió y trabajó, además se acercó a las obras de artistas como Auguste Rodin (1840-1917), Constantin Brancusi (1876-1957) y Wilhelm Lehmbruck (1881-1919).
Tiempo después, en 1927, regresó a su país de origen y obtuvo una plaza como profesor de dibujo en la Escuela de Maestros Constructores, de la Secretaría de Educación Pública (SEP), e incluso fue en una de sus salas de arte donde realizó una de sus primeras exposiciones, con dibujos y tallados en madera.
Al año siguiente volvió a Los Ángeles, donde realizó su primera exposición individual en la Book Shop Gallery, y posteriormente, en la Gump´s Art Gallery, en San Francisco, de acuerdo con el sitio "museoblaisten.com".
De 1932 a 1934, impartió clases en el país y esculpió obras monumentales por encargo, la primera de ellas "El llamado de la revolución", tallada directamente en piedra, y "El esclavo", que se extravió.
El escultor continuó con la antigua tradición de "La piedra de Miguel Ángel", no obstante, sus obras continuaron reflejando su espíritu nacionalista, ejemplo de ello son "El soldado herido" y el "Monumento a los defensores de la ciudad de Puebla".
En 1935, realizó una de sus obras consideradas magistrales, "La victoria" donde presentó la gloria bajo un...
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