Discos en la cuerda floja

Dentro de la industria de la música, el término "independiente" es sinónimo de apuesta por un hábitat donde el concepto "ventas masivas" no existe.

Ahí, géneros como el rock y la música electrónica han encontrado su alternativa de supervivencia, pero en México estas disqueras independientes aún no gozan de una estructura que les permita ser un constante impulsor de nuevas creaciones, y así lo aceptan muchos de los que intervienen en ellas.

"Es muy lamentable que a 15 años del boom del rock en español o del nacional no haya más estructura que en aquel entonces", declara Jerry Rosado, cabeza del sello independiente Intolerancia que ha sellado discos de Corcobado, Santa Sabina o a nivel local: Eva Malva.

"Los grupos no han encontrado una forma eficiente de establecer relación con el mercado, el grupo determina su valor comercial con base en cosas que son subjetivas y que no dependen de él.

"En la medida que los grupos asuman la responsabilidad de su proyecto y establezcan una economía basada en lo que son capaces de generar va a ser más factible que los grupos prevalezcan".

El intentar copiar la estructura de las disqueras trasnacionales, ha sido, según Rosado, el problema tanto de músicos como de disqueras independientes.

VENDER MÁS DE 5 MIL UNIDADES

Cuando las disqueras trasnacionales en México vieron su peligro de extinción, su apuesta por la música se enfocó en vertientes netamente populares, comerciales y algo de lo que en rock y música electrónica les asegurara ventas.

"Cuando no venden es cuando ya no le siguen editando más discos", declara Ismael Cardiel, promotor de EMI. "De hecho hay empresas que hacen un contrato donde marca que si rebasa una cierta cantidad de discos vendidos automáticamente se renueva su contrato y para que tenga un disco a nivel nacional y que sea negocio, como mínimo debe vender más de 5 mil unidades de ese disco".

Las nuevas propuestas que abarcan esos dos últimos géneros quedaron fuera y con ello los nuevos creadores se refugiaron en el movimiento que crecía de manera exorbitante en el mundo entero: la independencia, que por lo menos aquí en México, y sólo en algunas de ellas, la cantidad necesaria de discos vendidos depende sólo de los gastos de producción que puede equivaler desde mil 500 discos o hasta 3 mil 500.

"A la gente de las compañías independientes les interesa un disco por su valor de uso, o sea de disfrute y de aporte, mientras que para las transnacionales el valor principal es cuánto dinero van a...

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