Entregas en caliente / Nuevas formas de esclavismo

Paco Jones y Ricky tienen una misión que, a todas luces, resulta grata. Addison Slidell, una de las hijas de madame Resebud, les ha confesado que viven en un pequeño pueblo que funciona como país, dentro del territorio de Estados Unidos. No sólo eso, siguen teniendo las leyes del siglo XIX, cuando la esclavitud aún estaba permitida en ese país. Por esa razón, follan como locas con los negros. El problema, es que las mujeres de esa raza no quieren a los hombres blancos. Al parecer, no les satisface el tamaño de su miembro. Por eso Paco Jones y Ricky son los candidatos ideales para satisfacer las fantasías sexuales de todas las esclavas de la región. Aún más, no sólo deben follar con las mujeres de ese condado sino con las de las 13 naciones algodoneras de la zona. De ahí que cualquiera sueñe con tener una misión como la de ellos.

Paco Jones y Ricky han follado con más de cien mujeres la última semana. Al principio eran creativos. Perderse entre un par de tetas oscuras les podía llevar horas. También penetrar traseros, beber de las vulvas dispuestas y hasta participar de danzas tribales completamente desnudos. Hubo incluso una jovencita de vagina estrecha en donde Ricky se quedó atorado, víctima del tamaño de su miembro y de unos espasmos que Viva controlaba a voluntad. El placer tiene más novedades que cualquier otra cosa.

El problema es que están cansados. Tanto sacar y meter, tantas tetas, nalgas y agujeros por donde entrar son agotadores. Y apenas van en la segunda de las plantaciones algodoneras. Para colmo, cada vez que están por rendirse, un vaso de vino Mariano llega hasta ellos. Es una mezcla que renueva las energías físicas y para su cansancio, también los estímulos...

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