Entrevista / Sabel / Desnuda su cuerpo, no sus secretos

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MEXICALI.- SABEL NO tiene empacho en admitir que siempre le ha gustado ser admirada; por eso, hace más de una década aceptó la invitación de un extraño para probar suerte en el mundo del modelaje, sin importar que ello le exigiera mudarse de Canadá a México a empezar una nueva vida.

Lo que le disgusta, afirma la ex modelo de La Hora Pico, es que la gente no se conforme con los desnudos de su cuerpo, sino que quiera desentrañar asuntos personales, como la identidad del padre de su único hijo, de casi tres años.

Sobre todo, dice, le incomoda ser cuestionada sobre si se trata de un político mexicano, sólo porque recientemente se hizo público que el padre de la nena de Edith González es el senador Santiago Creel, y que Érika Buenfil tuvo un bebé con Ernesto Zedillo Jr.

"Es impresionante, porque nunca he dicho quién es el papá de mi hijo; me han preguntado varias veces si es (Alejandro) Encinas, pero jamás he confirmado esa información.

"Por las notas de otras señoras me están buscando a mí, pero la neta ni sé bien cuál es su rollo... Igual y hubo una gran fiesta de políticos e invitaron a todas las viejas de la artisteada, porque las tres caímos embarazadas casi al mismo tiempo", bromea.

Y es que para Sabel, (su nombre verdadero es Abena Denise Forsythe), el asunto es muy simple: mientras el padre de su hijo siga depositándole puntualmente la pensión del pequeño Oliver, ella mantendrá en secreto su identidad, tal y como ambos acordaron en un documento que firmaron.

"(El documento) es sobre los cuidados del niño, cuestiones de educación, su pensión, su techo... viene escrito que los detalles relativos al contrato, al embarazo y a la paternidad, se queden confidenciales", dice sonriente.

¿A cuánto asciende el depósito que recibes?

"Está muy bien, como para vivir tranquila, gracias a Dios".

¿En tu familia saben quién es el padre de Oliver?

"Mis abuelos, tías, primas, todos lo conocen".

¿Lo ubican?

"No son de aquí, así que, aunque les dé nombre y posición política, no les importa".

¿Tu papá lo conoce?

"No, y si se entera de que me lleva una gran diferencia de edad, ¡me mata!".

¿Y si un tercero llegara a hacer pública su identidad?

"Iría tras esa persona con todo, más les vale que no hablen de lo que no les corresponde, ese es tema de tres personas: dos adultos y un niño. Si alguien habla, le mando poner una chinga, y a ver qué le hace el papá".

Madre, sí; esposa, ¡no!

El romanticismo, las promesas de matrimonio, los vestidos de novia...

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