Un estadio en su honor

AutorIrene Savio

ROMA.- Es el jueves 26 y se inicia el luto en Nápoles. Tras un miércoles 25 de shock por la muerte de Diego Armando Maradona, venerado en esta ciudad como un santo, la bulliciosa y habitualmente pantagruélica Nápoles estalla en su honor.

Nadie puede ignorar la funesta noticia. En cada cruce, en cada lugar de la ciudad hay huella de él. "Ad10s", se lee incluso en un letrero electrónico de una estación del metro de esta ciudad del sur de Italia.

En el céntrico barrio español Quartiere spagnolo, donde está uno de los inmensos murales de Maradona que hay en la ciudad, se amontonan las velas, los improvisados altares y una continua procesión de fanáticos cuyo final se escapa a la vista.

Similar escena se repite en la zona del estadio San Paolo. El inmueble, sede del Nápoles-equipo de Primera División-, cambiará de nombre a "Diego Armando Maradona", confirmó el alcalde de la ciudad, el exmagistrado Luigi de Magistris.

En este coliseo del futbol en el que el Pelusa jugó de 1984 a 1991 también hay flores, bufandas, peluches y decenas de mensajes escritos a mano que van dejando niños, adolescentes y adultos. Los canales locales de televisión reportan constantemente cada detalle sobre el deceso del astro argentino.

"Necesitamos tiempo para llorar", responde el portavoz del club napolitano, Nico-la Lombardo, en un mensaje enviado a esta periodista.

"Es algo incomprensible para quienes no son de aquí. Esta es una ciudad muy desafortunada y difícil, una ciudad empobrecida que siempre ha sufrido mucho y él (Diego) nos llevó a lo más alto del futbol, nos colocó en el mapa; fue un héroe que nos devolvió el orgullo", cuenta a su vez el periodista Carlo Tarallo.

"Nápoles era la capital del futbol en esos años con él. Maradona siempre ha sido un personaje que parecía hecho a la medida para esta histriónica ciudad italiana, la más latinoamericana de Italia, con todas sus contradicciones", agrega.

Espejo de la ciudad

Maradona en Nápoles fue, en efecto, la encarnación del talento y, a la vez, de los excesos de esta ciudad. Fue el líder y genio que llevó al equipo local a conquistar sus dos únicas copas nacionales, una copa de la UEFA y una Copa de Italia, pero también fue el controvertido jugador que se hundía en la cocaína, el alcohol y en las fiestas con prostitutas; ha sido un descenso al infierno que todavía inmortaliza una infeliz fotografía suya en un jacuzzi con el mafioso Carmine Giuliano.

Una mancha que, sin embargo, muchos de sus aficionados le...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR