'...Me ganó el llanto'

Desde agosto del 2020, Mario no pudo soportar más el confinamiento de casi tres meses y tuvo que volver a circular con su microbús por Iztapalapa, pero ahora lo hará con la primera dosis de la vacuna Sputnik V.

"Me siento bien contento, es un alivio, yo manejo un micro y sube mucha gente y el contagio está cañón, y más de este lado de Iztapalapa", contó el hombre de 73 años.

"Sí me gana la emoción, de que ya está uno vacunado, como que ya hay más seguridad, más confianza, necesito trabajar, ya tengo 35 años de microbusero, pero me siento muy bien y me ganó el llanto porque me siento emocionado".

Él maneja en la Ruta 14, la cual sale de Calle 11 y tiene tres destinos: Nativitas, el centro de Iztapalapa y Metro Constitución y comenta que su miedo incrementó cuando comenzaron a fallecer sus compañeros por la enfermedad.

"Yo no tengo un salario, no tengo seguro social, no tengo nada, y de lo que sacamos es de donde nos mantenemos, si nos enfermamos, no nos alcanza, yo he conocido seis que se han muerto", lamentó.

Mario llegó a vacunarse con su esposa en la Sede de Servicios de Transportes Eléctricos, Colonia Sector Popular, uno de los ocho puntos en Iztapalapa, donde su hija les ayudó con la fila, tardando en acceder hasta una hora.

"Nunca me he contagiado porque traigo mi gel y no me quito para nada el cubrebocas. Hoy ya puedo trabajar con un poquito más de seguridad, aunque aún sé que me debo de cuidar mucho", agregó.

Al ser un trabajo esencial, el transporte público...

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