Grillotina / ¿Fuentes o cataratas?

Pase que Vicente Fox, ese crítico literario descubridor de Jorge Luis Borgues, lo haya designado Premio Nobel, pero es imperdonable que toda una secretaria de Educación haya metido dos veces la pata al mencionar a Carlos Fuentes.

Josefina Vázquez Mota, autora, además, de libros como el susodicho, primero lo confundió con Octavio Paz y después cambió el título a su primera obra cumbre: "La Ciudad", en vez de "La Región más transparente" A ver si Fuentes retitula al libro de doña Chepina, "¡Dios hazme viuda por favor!" como "¡Trágame tierra, por favor!". Pero, por lo pronto, ya se ganó unas orejas de Elba Esther.

Todo lo cual no obsta para que el país entero, encabezado por el Presidente de la República, rinda homenaje a don Carlos por sus 80 años de edad y por su obra que, más que de Fuentes, parece de cataratas por el impresionante número de títulos. Calderón anunció una edición de un millón de ejemplares, para repartir en las secundarias, de "El Espejo Enterrado", que no es una biografía de la Maistra Elba Esther, sino un ensayo sobre la mexicanidad.

Y nada sería más justo que, igual que la Presidencia, más dependencias, instituciones y hasta particulares imprimieran otras obras de Fuentes y las obsequiaran para su mayor difusión. Verbigracia:

Ya que la señora Vázquez Mota le cambió el título a "La Región", el IFE podría editar "La elección más transparente" con prólogo de Luis Carlos Ugalde y epílogo de López Obrador,

La Procuraduría de la República podría obsequiar ejemplares de "La muerte de Artemio Cruz", junto con sus informes sobre los crímenes de Colosio, Cardenal Posadas y Ruiz Massieu, que también son novelas.

El sindicato de maestros debería repartir copias de "Cambio de piel", con prólogo de su jefa, que estrena mink dos o tres veces al año. Aunque, diría la titular de la SEP, sólo cambia anualmente su propia piel.

Sería buen detalle que el Centro Fox editara "La Silla del Águila", novela de Fuentes sobre el poder presidencial, reproduciendo en la portada una foto de la silla que don Vicente se llevó de Los Pinos al rancho, aduciendo que "a Felipe le colgarían los pies". (Se ignora si, al menos, dejaron la silla presidencial que...

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