La guerra sucia sí va a juicio

AutorGloria Leticia Díaz

Después de una ardua batalla legal contra la Procuraduría General de la República (PGR), Martha Camacho Loaiza logró que el Poder Judicial de la Federación la reconociera como víctima de "crímenes de lesa humanidad" cometidos durante la guerra sucia de la década de los años setenta y ordenara a la dependencia encabezada por Arely Gómez reabrir el expediente integrado por la Fiscalía Especializada en Movimientos Sociales y Políticos del Pasado (Femospp), desaparecida en 2006.

En la resolución 209/2014, referente a la revisión de un juicio de amparo, el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Penal del Primer Circuito ordenó a la PGR considerar como crímenes de lesa humanidad los abusos de agentes del Estado cometidos en contra de Camacho Loaiza y su primer esposo, José Manuel Alapizco, en el contexto de "un ataque sistemático" por ser integrantes "de un grupo subversivo denominado Liga Comunista 23 de Septiembre".

Araceli Olivos Portugal, coordinadora del Área de Defensa del Centro de Derechos Humanos Agustín Pro Juárez (Prodh), confirma: "Es la primera vez que el Poder Judicial le ordena a la PGR investigar crímenes de lesa humanidad". La Prodh representa a Camacho, presidenta de la Unión de Madres con Hijos Desaparecidos de Si-naloa (UMHDS).

La sentencia del tribunal unitario se deriva de la decisión tomada por la PGR en noviembre de 2012, cuando declaró el no ejercicio de la acción penal en el caso de Martha Camacho, abierto 10 años antes por la Femospp. La PGR consideró que los delitos denunciados -homicidio, allanamiento de morada, abuso de autoridad y privación ilegal de la libertad, encuadrados en el fuero común- habían prescrito por haberse cometido casi cuatro décadas atrás, en el marco de la llamada guerra sucia.

Hace 38 años y estando embarazada, Martha Camacho fue extraída de su domicilio por soldados de la IX Zona Militar, policías de Sinaloa y miembros de la Dirección Federal de Seguridad (DFS); fue torturada durante 49 días, obligada a presenciar el asesinato de su esposo -cuyo cuerpo está desaparecido-, a parir en condiciones infrahumanas y a ver cómo su bebé era encañonado en la cabeza por sus agresores en las instalaciones castrenses.

En agosto de 1977, cuando sucedieron los hechos, Martha y José Manuel -ella estudiante de Economía y él maestro de Ingeniería Civil de la Universidad Autónoma de Sinaloa, UAS- eran miembros de la Liga Comunista 23 de Septiembre.

Tras la creación en 2001 de la Femospp, dirigida por Ignacio...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR