Ivaginaria / ¿Cómo lo hacen los gays?

En los espacios de Ivaginaria surgen muchas dudas sobre la sexualidad y el ejercicio del ser sexual. Hay personas que van más allá y sienten curiosidad por las actividades forniciatorias de otr@s. Lo cual confirma dos cosas: el ser human@ es curioso por naturaleza y a tod@s nos encanta meternos en lo que no nos importa.

Una señora me ha contado el otro día que ella desconoce todo lo que concierne a la homosexualidad, pero que ha sido tolerante, y como su estilista es gay, pues ella es amigable con ellos.

Le comenté que ella no tiene qué comprender nada y que su peluquero es un señor como cualquier otro, con la diferencia que él prefiere y se orienta hacia personas de su mismo sexo género.

Entonces ella cuestiona: y ellos ¿cómo lo hacen?

Como vivimos en una sociedad que centra la importancia del sexo en la reproductividad, el asunto del coito es fundamental.

Ergo, la idea de que un pene debe estar metido en una cavidad es absolutamente necesaria para quienes piensan que el ejercicio del sexo sólo es metisaca.

Asimismo existe la suposición de que todos los gays son personas que gustan del sexo anal, es decir, que son pasivos y activos, como se llama vulgarmente.

Y como cualquier ser humano en el planeta, una persona homosexual no brinca de alegría en todos los casos, cuando se trata de una penetración en el ano. Quizás much@s le agarran el gusto, porque puede llegar a ser una práctica muy placentera.

Pero definitivamente hay hombres y mujeres, de la orientación y preferencia sexual que sea, que de plano no toleran ese tipo de contacto, o que son muy estrech@s, o que no les late y no pueden construir en su mente una conformidad o idea que les propicie gozo por la vía anal.

Ergo, no todos los gays disfrutan del sexo anal como receptores, a otros no les gusta pero lo toleran, algún@s de más allá sólo lo ejecutan por complacer a sus parejas, y quizás a algún distraíd@ lo agarraron descuidado y se le fue el tiro por el tafanario. Y a muchos claro, les encanta poner.

Lo interesante de la madame que me preguntaba, es que le costaba trabajo creer o pensar que una relación entre dos hombres, específicamente, también estaba regida por las actividades, usos y costumbres iguales a las que existen en las relaciones heterosexuales.

Se besan, se abrazan, se agarran de la...

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