Nosotros los jotos / La fiesta de Nan y otras fotos

Bobby se está masturbando. Su cuerpo es esbelto, blanco pero con tupidas zonas oscuras de vello, incluso en los hombros. Parece estar sentado. Los labios, pezones y el glande se ven colorados, sin duda por el disparo del flash que lo ha sorprendido de frente, con la cabeza ladeada y la mirada baja, concentrado en ahorcar al ganso.

¿De veras lo ha "sorprendido" la cámara?

Quien dispara, o quien disparó cualquier noche ociosa de 1980 fue Nan Goldin. Bobby y Nancy -de cariño Nan- eran amigos. Como toda "La Tribu" de la fotógrafa, el joven se había acostumbrado a que su cuatacha no soltara ni para ir al baño la Pentax coronada por un flash. A varias chavas las había retratado retocándose frente al espejo y también sentadas en el excusado, con la tanga en las rodillas y el papel en la mano. Me imagino que les hacía gracia y no lo tomaban como una grosera impertinencia.

También en el trono, totalmente desnudo y fumando, la fotógrafa nacida en Washington inmortalizó a Brian, un guapo ex marine que fue su novio. Entre 1980 y 84 lo captó en diversos momentos, hasta que el bruto desapareció después de darle una golpiza espantosa.

Un mes después de la agresión, Nan se hizo un autorretrato impactante en el que se le ven los ojos aún amoratados. Tenía que documentar también ese mal momento porque desde el verano de 1979 se propuso capar todo lo que hacía con esa "familia ampliada" que formó en Nueva York: bailar en una fiesta, jugar Monopoly, drogarse, discutir, coger, dormir, casarse, tatuarse, travestirse, parir, festejar a los hijos, ducharse, viajar en tren, morir a causa del sida...

Tomó miles de imágenes en una época en la que había que comprar rollos de película y después revelarlos. No como hoy que con un celular captamos hasta el hartazgo escenas cotidianas, incluidas nuestras cochinadas solos, en pareja, trío o banda de pitos, y las compartimos de inmediato en nuestras redes sociales sin pudor.

Pero a finales de los años 1970 fue un proyecto pionero, me hizo ver César González-Aguirre, curador del Centro de la Imagen, donde se proyecta la secuencia de 700 transparencias, con una pista musical que Nan compuso haciendo una selección de esos momentos íntimos. Claro que primero pidió la autorización de La Tribu y respetó la intimidad de quienes -sin duda muy pocos- no se la dieron.

Lo que fue pensado como un divertido diario visual, así se convirtió en un performance, primero presentado en el bar donde la fotógrafa veinteañera trabajaba (nació en...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR