Línea 10

COMO EN el beisbol, lo único claro en el pleito entre México y Cuba es que esto no se acaba hasta que se acaba.

La virulencia de la primera respuesta de La Habana al congelamiento de las relaciones diplomáticas sólo permite ver que los cubanos todavía tienen algunos ases bajo la manga.

Porque eso de que el régimen de Fidel Castro dará "respuesta oportuna" a la decisión mexicana, suena más a amenaza que a cualquier otra cosa.

Hay quienes dicen que el dictador caribeño sólo esperará unos días antes de comenzar a disparar los misiles que le pudo sacar a Carlos Ahumada durante los días que lo tuvo a la sombra en la prisión de Villa Marista.

Aunque también hay quienes dicen que Castro, nomás por el puro gusto, a la mera hora sí vendrá a la Cumbre de Europa, América Latina y el Caribe que se llevará a cabo a fin de mes en Guadalajara.

Sobre todo porque desde ahora se sabe que en cuanto pise suelo mexicano, el cubano será objeto de "espontáneas" muestras de apoyo y manifestaciones en su favor.

Algo trama Castro y, sea lo que sea, seguramente no caerá muy bien en Los Pinos... no por nada reza el adagio: Más sabe el dictador... perdón, fue un lapsus... ¿cómo era? ah, sí, Más sabe el diablo por viejo, que por diablo.

Y DEL LADO mexicano no cantan mal las...

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