Marcados por la tragedia

LA HISTORIA de la extinta División de Homicidios Intencionales, ahora transformada en la Unidad de Homicidios Dolosos de la Fiscalía Central, se ha visto marcada por la tragedia con el asesinato de tres mandos con un pasado entrelazado.

De 2009 a la fecha, la compleja labor de dicha área se ha cubierto de luto.

Y es que el asesinato de Samuel Pérez Gutiérrez, jefe de grupo ocurrido el viernes, se suma a los crímenes de Carlos Alberto Rayas Rodríguez, jefe de la entonces División de Homicidios Intencionales y Evaristo Ortega Chagoyán, coordinador de ministerios públicos de la misma área.

Rayas Rodríguez murió acribillado por sicarios en moto el 3 de abril del 2009 cuando circulaba sobre Anillo Periférico, al cruce con Camino Viejo a Tesistán, en la Colonia Tuzanía, de Zapopan; una vecina a la que dio "raite", corrió con la misma suerte.

Días previos a su ejecución, ante diversas amenazas de muerte, a Rayas Rodríguez le ofrecieron escoltas.

Aunque en principio se resistía a la idea, el jefe de división contemplaba que entre ellos estuviera Pérez Gutiérrez, elemento de su confianza y quien entonces ya fungía como jefe de grupo.

Sin embargo, conociendo las capacidades de éste en el campo, prefirió que continuara su labor como jefe de grupo y no como su escolta, revelaron fuentes cercanas...

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