¡Con pelos en la lengua!

¡Queridos Metrolectores! Me entró completa...la alegría, y no que crean que es puro bla, bla, bla, ¡de verdad!, su Negra está henchida de felicidad porque todos los días me acompañan. Estoy contenta porque me han dejado entrar... en sus corazones y espero que se la estén pasando chido con este espacio lleno de chistes. Pero, amigos, creo que su Negra ya echó mucho rollo y mejor vamos entrando en materia, y aquí le van sus chistoretes de hoy.

Ebrio y aprovechado

-Dicen que no hay borracho que trague lumbre, pero hay de borrachos a borrachos y aquí le va uno de un alcoholizado abusado y abusivo.

Un hombre ebrio y cachondo se asoma a un table de la Calzada Madero en busca de quien pueda satisfacer sus instintos cachorros, pero el lugar está desolado y se pregunta ¿pues no que Nuevo León es tierra de osos?

El borrachín sigue caminando y se topa con una casa de citas, entra y observa todo el material que está a su disposición y les dice: -¿Quién quiere hacer el amor conmigo? ¡Pero tiene que ser como a mí me gusta!

Todas las chicas comienzan a preguntarse: -¿Y cómo será eso? -No, yo no le entro.

Hasta que sale una valiente y le dice: - Yo mera.

De inmediato el machín carga en sus brazos a la chamacona y se la lleva a la habitación.

Después de unos 30 minutos aparece la chica con el vestido desacomodado y despeinada y una de sus colegas le pregunta: - ¿Qué pasó? ¿Cómo quería hacer el amor ese borrachín?

Indignada la chamacona responde: - Pues el muy desgraciado lo quería gratis.

La enferma

-Y ya que andamos por la calles donde predomina el alcohol y las mujeres, pues nos pasamos con otras chicas que merecen un monumento porque hacen felices a muchos y aguantan a tanto caón...

Dos prostis se encuentran en una tienda de conveniencia comprando café para aguantar la noche mientras esperan clientes en una esquina de la Avenida Colón, y una le pregunta a la otra: - ¿Estabas de vacaciones?, lo digo porque no te había visto en la esquina.

- Andaba en... Granada.

- ¡Ah, que chido!, de viaje por Europa, que romántico ¿En Granada, España?

- ¡No, idiota! No podía...

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