La expoliación petrolera

AutorHéctor Tajonar

Es preocupante que el problema de la corrupción no represente una prioridad en la propuesta de reforma energética del gobierno. La corrupción patente y creciente en Pemex, como en muchos otros ámbitos de la vida nacional, es ignorada, encubierta o lavada con el agua maldita de la impunidad. Permitir y fomentar la impunidad es apostar por la restauración de un salinismo bien peinado, ávido de reformas estructurales sin sustento ético (y de dudosa racionalidad económica), que no ve ni oye el clamor de la desconfianza ciudadana. Mala señal, camino errado. Afrenta.

En la bien argumentada iniciativa de decreto para reformar los artículos 27 y 28 de la Constitución no se menciona la palabra "corrupción". La omisión puede tener tres explicaciones: que se piense que no hay corrupción en Pemex (lo cual es irreal, aunque sabemos que la arrogan-cia patrimonialista suele ser ciega); que se quiera ocultar la podredumbre que corroe a Pemex (labor imposible), o que se pretenda evadir el tema por considerarlo irresoluble ("si no puedes con el enemigo, únetele").

El quinto de los seis "ejes estratégicos" de la iniciativa señala: "Transparencia: Garantizar a los mexicanos el adecuado acceso a la información sobre la administración del patrimonio energético nacional". El octavo de los "10 beneficios que traerá la reforma", publicados en la página de Presidencia dedicada a la reforma energética, se ofrece que los ciudadanos podrán vigilar las operaciones e ingresos petroleros derivados de los nuevos contratos, los cuales estarán a la vista para ser consultados en todo momento.

Se dice que cada año serán auditados todos los contratos vigentes en México, aunque no se informa quién realizará dicha auditoría. Así mismo, se promete que habrá más transparencia y mejores instrumentos de control sobre la industria petrolera, aunque no se especifica la forma de lograrlo. Y algo muy interesante, dicho casi en secreto: "Un objetivo fundamental de la reforma es acabar con la corrupción y los privilegios especiales". Tampoco nada indica cómo habrá de realizarse esa hercúlea hazaña, ni sabemos si el señor Romero Deschamps se dio por aludido.

En el rubro "Mitos" se afirma: Es falso que la reforma energética hará que los gobernantes se queden con las ganancias del petróleo. "La reforma plantea nuevos mecanismos de transparencia, para que las ganancias de la industria petrolera estén al servicio del desarrollo de México, bajo la vigilancia de los ciudadanos". No encontré dicho...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR