Reporta prácticas de discriminación y vejaciones en el Colegio Militar

Señor director:

Señor general: Cuando se conoce el Heroico Colegio Militar se siente un gran orgullo. Lo digo porque he ido a visitar a un cadete. En una placa a la entrada se dice: "Está usted entrando al templo del honor". ¡Caray, qué orgullo!

Sin embargo, los cadetes son sometidos a todo tipo de vejaciones, humillaciones, robos y abusos, y ellos aguantan por un objetivo: servir a México. Así, aguantan todo y no pueden decir nada, no sólo por el valor, el honor y el respeto que les inculcan, sino, creo yo, también por miedo a represalias.

Ahora lo que se me hace más grave e injusto es que los superiores, sólo por tener grados más altos, se crean dueños no sólo del Colegio Militar, sino también de los sueños y metas de los cadetes, y que con mentiras, amenazas e injusticias puedan sacar y dar de baja a quienes ellos quieran o a quienes les caigan mal, terminando así con el futuro de jóvenes que sueñan con ser militares y servir a su país.

Para quienes no nos perdemos los desfiles de cada 15 de septiembre para ver a nuestras Fuerzas Armadas y, sobre todo, a los cadetes, desfilar con honor y gallardía, es una pena y vergüenza que en el Colegio Militar exista discriminación hacia los cadetes que, siendo mexicanos, tienen rasgos y apellidos que no son muy...

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