Símbolo de la soberanía

AutorJudith Amador Tello

Para el doctor en Filosofía de la Ciencia Luis Avelino Sánchez Graillet, la historia de México "nos ha llevado a ver al petróleo no como una mercancía cualquiera, sino como un bien definitorio de nuestra identidad nacional, y a Pemex como uno de los más destacados emblemas de nuestra independencia y soberanía".

En su ensayo "Apuntes sobre la formación de la idea del petróleo como patrimonio nacional de México", incluido en el libro La idea de nuestro patrimonio histórico y cultural (Conaculta, 2011), el profesor de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM analiza por qué la propuesta de reforma energética del gobierno de Felipe Calderón provocó el rechazo y la movilización de buena parte de la sociedad, y cómo los mexicanos han establecido una relación afectiva "tan peculiar con el petróleo".

El coordinador del volumen, Pablo Escalante Gonzalbo, explica que se reúnen reflexiones sobre aspectos que suelen verse separados pero forman parte, "por igual, de aquello que los mexicanos consideramos nuestros principales bienes, nuestra riqueza, lo que hace distinta esta tierra: los volcanes y el maíz; las pirámides y los templos; la Virgen a la que muchos mexicanos confían su suerte y agradecen sus logros; la riqueza mineral, el petróleo, los lugares queridos, las playas y las haciendas".

Son reflexiones, agrega, sobre cómo se perciben esos bienes y el lugar que ocupan en la conciencia nacional.

Sánchez Graillet rememora la movilización popular de 2008. Contrasta que quienes confiaron en la rápida aprobación de la reforma, sin oposición ciudadana, debieron desengañarse. En cambio, para quienes aún ven a la industria petrolera como un "emblema de nuestra soberanía nacional", fue "la mejor conmemoración posible" por los 70 años de la expropiación petrolera.

Y en tanto que muchos argüyeron en aquel momento que las movilizaciones (varias convocadas por Andrés Manuel López Obrador) eran inducidas y perseguían beneficios políticos, el investigador sostiene que, ciertamente, puede haber algo o mucho de ello, pero no habrían tenido impacto si los mexicanos "no percibiéramos al petróleo como un bien peculiar-mente 'nuestro'".Y cita al politólogo Alfredo Jalife para subrayar la carga emotiva y nacionalista de ese bien patrimonial: "Pemex no es una empresa. Pemex es un país; Pemex es México."

En 33 páginas, el filósofo hace un recuento histórico desde la época prehispá-nica hasta nuestros días. El uso que se daba al chapuputli antes de la llegada de los...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR