San Cadilla / Dominguero

Cuando Tigres buscó a Douglas Costa

Entre las historias de fichajes frustrados que han tenido los clubes regios, hay algunas en las que cuando uno mira en retrospectiva se da cuenta del nivel de jugadores que intentaron traer los Tigres o los Rayados.

También uno se da cuenta de por qué esos jugadores finalmente no vinieron al futbol mexicano. No solamente porque había que pagar muchísimo dinero, sino porque su nivel, honestamente, no era para la Liga MX.

Uno de esos casos es el de Douglas Costa. Sí, el jugador que hoy destaca en la Juventus y que antes estuvo en el Bayern Múnich.

En los tiempos de Santiago Martínez como presidente, de Héctor González Iñárritu como vicepresidente y de Daniel Guzmán como director técnico, Costa era el número uno en la lista de candidatos para el ataque felino.

Las negociaciones se dieron en diciembre del 2009 entre Tigres, Gremio y el representante del jugador.

Ese año, Douglas Costa fue mundialista Sub 20 con Brasil y subcampeón en la Copa del Mundo de Egipto.

Se decía que el Manchester United también lo quería y ofrecía unos 12 millones de dólares, pero que el jugador realmente valía unos 20. Ésos eran los rumores.

En las palabras del propio "Travieso", Tigres "hizo un ofrecimiento que nunca imaginé que lo fuera a hacer y el Gremio no quiso". La idea de los brasileños era venderlo a Europa.

Y eso quedó clarísimo, Douglas Costa se fue al Shaktar Donetsk, de Ucrania.

Después de un mes negociando, se le cayó su opción número uno y empezaba el tachadero de nombres...

La lista

La consigna parecía ser traer a un brasileño para que acompañara a Itamar Batista.

Si no pudieron traer a Douglas Costa del Gremio, Tigres siguió peinando el Brasileirao para encontrar a oootra promesa.

El siguiente nombre entre los candidatos era Carlinhos, del Curitiba. El repre del jugador apenas se dignó a escuchar el interés de los Tigres, ah, pero cuando el equipo descendió dijeron que cuándo podían negociar.

Eso no les gustó a los felinos y siguieron bajando en la lista.

Ahí apareció el nombre de Everton Cardoso. 21 años. Zurdo. Flamengo. Campeón de Brasil.

"Éeese es", dijeron en Tigres.

Supuestamente, el Real Madrid y el Deportivo La Coruña lo habían observado. Así que barato no iba a salir. Y así fue.

Para abrir boca, el papá del jugador que fungía como su representante pidió a Tigres un salario de 900 mil...

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