San Cadilla / Dominguero
El BB cumple 5 añitos
El BBVA, el estadio más moderno de América Latina cumple hoy su primer lustro de vida.
El 2 de agosto del 2015 se jugó el partido inaugural entre los Rayados y el Benfica de Portugal. Fue la noche que descubrimos a César Montes y conocimos en vivo a Rogelio Funes Mori como albiazul y goleador.
¿Quién no se acuerda del espectacular show que se montó en el "Gigante de Acero"? ¿A quién se le sigue enchinando la piel nomás de recordar la ovación a las leyendas rayadas? ¿La más efusiva fue para Víctor Manuel Vucetich?
Seguramente, la primera ola digital sigue en la retina de cuántos estuvimos aquel día en un día inolvidable.
Después de 70 años de existencia, los Rayados abrieron una casa digna para un club que en estos cinco años ha reverdecido laureles con títulos de Liga, Copa y Concachampions.
Fue todo un acontecimiento para el Monterrey que jugó sus primeros partidos en el Parque Cuauhtémoc en 1945, cuando el beisbol era el deporte rey en la Ciudad.
Por fin había llegado el momento de tener su casa propia, porque hubo un tiempo que jugaron hasta en el Universitario. No fue del todo malo, esa época fue la de aquel equipo al que sólo le faltó el campeonato.
Hubo un juego que hasta entraron 55 mil personas para ver a Pandi en el Uni.
Y, claaaro, pasaron épocas imborrables en el Estadio Tecnológico, pero era rentado. No era propio.
El Tec guarda quizá la esencia del rayado, es donde creció la pasión por este equipo. Donde se salvaron del descenso en un par de ocasiones, donde celebraron el primer título de Liga, gozaron campeonatos de Copa y de Concacaf, también.
Donde se hizo la tradición, pero inaugurar el BB fue como llegar a casa.
Hoy, hace 5 años se cumplió el sueño.
Ha habido llanto...
Sí, la construcción del estadio no fue sencilla, tardó años, muchos más de lo pensado cuando presentaron la maqueta con bombo y platillo en Palacio de Gobierno.
Hubo errores humanos que costaron tiempo y dinero, en las coordenadas, en los cálculos para la instalación del techo, en tantas cosas que la espera se hizo eterna. En lugar de inaugurarlo en el 2011, lo hicieron hasta el 2015.
Pero esa espera valió la pena, aunque no todo ha sido coser y cantar.
Ha habido sufrimiento por las Finales perdidas, tantas que hasta algunos parecían convencerse que sí había una maldición en el coso de Guadalupe.
Las dos de Liga...
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