Sensibiliza familia sobre adopciones

Cuando surge la idea de adoptar, el sueño de ser padres suele llevar a las parejas a preferir a un bebé recién nacido.

La realidad es que en México la mayor parte de los niños que están en la necesidad de ser llevados a otra familia se encuentran entre los 5 y los 11 años.

También se espera una vida perfecta una vez que el pequeño llega a casa, pero lo que hay son duros retos, apunta Mónica Aguilar, quien junto con su esposo, Alejandro Cáceres, formalizaron el año pasado la asociación civil Abba Adopción y Acogimiento Familiar.

"A veces la adopción se idealiza mucho, pero realmente es complicada", comenta esta pedagoga de 36 años, quien con Alejandro se dedica a informar a familias mexicanas de los mitos y realidades, así como de las implicaciones legales y emocionales de la adopción.

"Muchas veces los niños que vienen a nuestra familia llegan con la principal herida, que es el abandono. Los abandonaron, literalmente, o sus padres no pudieran cuidarlos por drogas, alcohol, abusos, y los niños fueron retirados, y la herida llega, y uno tiene que estar dispuesto a sanarla".

Oficialmente, en México hay unos 30 mil niños con necesidad de ser adoptados y que están en instituciones como casas hogar o bajo el cuidado del Estado, al provenir de una familia biológica que ejerció violencia, negligencia o abandono.

Con Abba, este matrimonio busca crear una cultura sobre las dos figuras legales que existen en México para que estos niños ejerzan su derecho a vivir en familia, la adopción y el acogimiento familiar.

En 2014, Mónica y Alejandro, padres de dos hijos biológicos, Alegría y Samuel, de 7 y 4 años respectivamente, fueron los primeros en ingresar al programa Familias de Acogida, del DIF del Estado, donde recibieron capacitación para ser cuidadores de un niño de casa hogar.

En este programa, el menor de edad sale de la casa hogar o de la institución oficial en la que se encuentra para vivir, temporalmente, con una familia. Esto mientras la situación legal del niño se arregla, ya sea que vuelva a su familia de origen, o que pueda ser adoptado.

Así, a esta familia que vive al sur de la Ciudad llegó hace cinco años una niña entonces de cuatro, y cuyo nombre no puede ser revelado por instrucción legal. Sin embargo, a la misma pequeña le gusta que le llamen "Sofía", hoy de nueve años.

DERECHO DEL NIÑO

Mientras en la adopción el niño se convierte legalmente en hijo de la familia, el acogimiento es sólo temporal.

Al ver los beneficios para "Sofía"...

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