SIGNOS / Sin presumir

A la mayoría de los jóvenes que acostumbran beber con desenfreno no les va a causar ninguna gracia, pero a sus padres y a quienes sin deberla ni temerla han sido víctimas en algún percance vial o han perdido a algún familiar por esa misma causa, les resultaría gratificante que el Congreso de Jalisco presionara en serio a la Secretaría de Vialidad para que en la brevedad posible se pusiera en marcha un operativo eficaz para frenar a quienes conducen en estado de ebriedad.

Es urgente, como lo solicitó hace poco más de un mes el presidente municipal de Zapopan, Arturo Zamora Jiménez, que en las principales avenidas de la zona metropolitana opere un sistema de supervisión de conductores, a quienes se les someta a la prueba del alcoholímetro, para ver en que condiciones se ponen detrás del volante.

Aunque ya hay un acuerdo al respecto, aprobado por el Pleno del Congreso local el pasado martes 7 de diciembre, los legisladores deberían presionar, a través de la Comisión de Vialidad, Transporte y Comunicaciones, que preside el priista Juvenal Esparza Vázquez, para que el Secretario de Vialidad, Alfonso Rejón Cervantes, se ponga las pilas e inicie pronto esos vitales operativos.

Deberían ponerlos en marcha en estas festividades de fin de año, cuando los jóvenes empinan con mayor vigor el codo, algo que difícilmente ocurrirá, por razones técnicas, pero no importa cuanto se tarden, con tal de que no nos alcance el cambio de sexenio sin hacer nada.

Los diputados de Jalisco aprobaron un acuerdo para pedir que las Secretarías de Vialidad y de Salud, en coordinación y con la supervisión de la Comisión Estatal de Derechos...

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