Trans, sin identificación
GUADALAJARA.- "Somos indocumentadas, no tenemos un documento que avale nuestra identidad", sentenció Candy Chávez, presidenta de la Red Mexicana de Mujeres Trans en Jalisco.
Ella pertenece a un segmento de la población que, aseguró, es segregado en materia jurídica y administrativa, pues en la entidad no existe una ley de identidad de género que reconozca a hombres y mujeres transexuales y transgénero.
Al identificarse socialmente como una persona distinta a la que dice su acta de nacimiento primigenia, los problemas se desencadenan: no pueden acceder al seguro social, a créditos de vivienda y a todo aquello que implique presentar una identificación oficial para hacer un trámite.
"Seguimos siendo personas olvidadas", agregó Chávez.
Si bien no se sabe la dimensión demográfica de este segmento, pues en sus censos el Inegi no incluye preguntas orientadas a identificar a la comunidad lésbico, gay, bisexual, transexual, transgénero, travesti e intersexual (LGBTTTI), ya hay Estados que reconocen su identidad.
En 2014, la Ciudad de México fue pionera al reformar el Artículo 11 de su Constitución local para que el cambio de nombre y género se pudiera hacer con un simple trámite administrativo ante el Registro Civil, eliminando los juicios que debían interponerse para ello.
En julio pasado se sumaron Michoacán, al modificar el Artículo 117 del Código Familiar, y Nayarit, con ajustes al Código Civil y el Código de Procedimientos Civiles.
Precisamente ante la falta de este marco normativo hay personas de Jalisco que optan por ir a la Ciudad de México a arreglar su caso, aunque terminan con otra traba: la doble identidad.
Los requisitos son tener más de 18 años, presentar un acta primigenia en original y copia, una identificación y un comprobante de domicilio.
Según Izack Zacarías Nájar, presidente de Impulso Trans, una asociación que desde 2013 orienta jurídica y psicológicamente a personas de la comunidad LGBTTTI, hay al menos 335 personas en el Estado con el problema de la doble identidad.
Aunque tengan un documento con su nuevo nombre y género, no lo pueden hacer válido en Jalisco, a menos que soliciten un costoso Amparo que implica desembolsar desde 10 mil hasta 50 mil pesos.
"Somos personas con una doble identidad jurídica que no hemos podido homologar todos nuestros documentos, seguimos teniendo problemas", apuntó.metrópoli
En el 'limbo'
La comunidad LGBTTTI pide que haya en Jalisco una ley de identidad de género.
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