El valedor / La linterna mágica

El cine nacional, mis valedores. Es propósito declarado de cada nuevo sexenio mejorar la calidad cinematográfica. Como si todo fuese intenciones, gobierno, dinero y leyes; como si no se tratara, antes que de arieles y diosas de plata, de talento y algo más. Como pruebas, las cintas del neorrealismo que produjo una Italia en ruinas tras de perder una guerra mundial, obras maestras a las que todo faltó, menos talento. Roma, ciudad abierta, Milagro en Milán, Ladrones de bicicletas...

La industria, en nuestro país, como que alzaba esperanzas: ya se produjo El apando, ya se logró Canoa, como antes El esqueleto de la señora Morales, y aquellas inolvidables Esquina bajan y Hay lugar para dos, de Alejandro Galindo, ese viejo formidable que en Ni hablar del peluquín se engulle el relato de Averchenko sin darle el crédito.

Pues sí, pero más allá de las esperanzas que alentaban Tlayucan, Tiburoneros y algunas más, con la invasión de las Sashas y Güeros Castro de ayer y hoy el cine mexicano se abarraganó en tráfico de chicharrón con pelos, con pelos y señales de ficheras, taloneras y demás flor y nata de la mancebía, la vagina, el clítoris y el albur, machihembrados. La industria del nalgatorio como productora de dinero, en auge; como calidad, en picada, en plena degradación. Y a esto quería yo llegar:

¿Se percatan ustedes de que el cine cimarrón, el de trayectoria centenaria y momentos de sombra -tantos- como de luz -tan pocos-, ha venido empotrando la cámara en emplazamientos distintos? A ver.

Desde Santa hasta Allá en el rancho grande y anexas, el cine tricolor emplazó su cámara en el patio interior de la hacienda, enfocada en la ventana (madreselva, buganvilias) de la casta Lupita, que a la luz de la luna recibía, mordisqueando el rebozo, los requiebros y las romanzas de su charro cantor: Mujer, abre tu ventana - para que escuches mi voz...

Y la gayola, que se venía (de aplausos). Qué...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR