La Verdad con mayúsculas

AutorJulio Scherer

De esto hablaba a solas con Susana. Yo sentía que se apretaba contra mí, que nada mejor podía hacer en el agobio que era nuestra vida. La miraba a los ojos para mirar atrás de su mirada verde y descendía a los labios que tanto me gustaban. Temía lo peor, el despertar en ella de una amorosa compasión, irrepetibles los días que no se quieren olvidar.

Sin frontera que separe las palabras del pensamiento, un día me dijo Vicente Leñero: "Quizás abandonamos la asamblea antes de tiempo. Ya se coreaba tu nombre. En fin, no sé".

Un agujero me devoró. Si nos habíamos salido antes de tiempo, el miedo me había ganado.

Trabajábamos en Proceso, la revista que ya levantaba vuelo, y volvió Vicente Leñero, directo e inesperado. Me dijo que había escrito un libro, Los periodistas, que me dedicaba la obra de la que yo era el eje y que no me mostraría una línea de su manuscrito. No se expondría ni me expondría a un punto de vista...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR