Zona Submetropolitana / Sueño de una tarde
En estos días festivos resultó interesante observar cómo, de pronto, algunas de las diversas zonas que fueron arrasadas por los sismos de 1985, intentan recuperar un poco del esplendor que tuvieron por muchos años.
Uno de los puntos más inmediatos que de seguro le vendrán a la memoria, estimado lector, es aquél que quizá usted ha atravesado en no contadas ocasiones y que, incluso, lo ha acostumbrado a su actual paisaje desolador: la avenida Juárez.
La zona donde se ubica la Alameda Central ha sido, desde siempre, referencia obligada de historiadores que han plasmado la algarabía del lugar, así como el paseo obligado por lo menos una vez, de todos aquellos quienes hemos vivido en esta urbe.
Ya desde el siglo XVII la enorme manzana ubicada al pie de la actual avenida Juárez, era contemplada como una zona de regocijo, solaz y esparcimiento tanto de pudientes como de las clases bajas y marginales capitalinas.
Posteriormente, a mediados del siglo pasado -1849-, los historiadores señalaban el abandono al cual, en ocasiones, era sometido el lugar, debido al desinterés de la "municipalidad" de la época -igual que la mayoría de las recientes, más preocupadas por obtener votos que avances, me dice el de junto-.
Léase lo siguiente con voz de historiador antiguo, habitante de la ciudad en esos tiempos: "se nota el abandono imperdonable de la municipalidad, a cuyo cuidado se halla este vergel encantador.
"Los jardines deberían estar cubiertos de rodas, de dalias, de jazmines y otras flores vistosas y aromáticas, y en su lugar hay, o montones de tierra, o yerbas silvestres.
"Cada uno de los ayuntamientos que entra... promete hacer un paraíso de la ciudad, y el resultado es que sale dejando las calles sucias y sin empedrar, la Alameda deteriorada, los acueductos destrozados y los faroles apagándose".
Parecería incluso que lo anterior hace referencia a una situación recurrente que se vive no sólo en el parque central capitalino, sino en toda esa zona que, como ya se indicó, lleva a cuestas el olvido de las autoridades.
En la actualidad los ojos gobernantes de la Ciudad de México han volteado para ver el que puede considerarse como el terreno baldío más grande en el D.F., justo ahí, donde antes estaban, entre otros, el Hotel Regis.
Alguna vez alguien hizo mención de la "megapropuesta" intitulada "Proyecto Alameda", la cual buscaba rescatar esa zona desolada para devolverle parte del carácter histórico, cultural, económico y turístico con el que ha contado...
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